Ayer me fui de cenita
con unas amigas, pero claro, para que aquí “al amigo” no se me quedara “mustio”,
pues le deje preparada la cena, y pensaréis “gensanta, pero qué le preparó
ésta que nos lo cuenta hoy como truco de cocina??”.
Bien. Razón no os
falta.
¿Sabéis esas sobras
que rulan por la nevera??.. que si un par de lonchas de jamón york que ya están
empezando a ponerse “melosas”... uy! este ½ calabacín... Anda... si tengo aquí
una berenjena que ya está diciendo “úsame que me voy a convertir en arma de
destrucción masiva”...
En fin... restillos
varios...
Todo bien troceado a
un recipiente para el horno. Especiamos (yo eché pelin de sal, finas hierbas y
orégano). Un huevo batido por encima y como colofón queso rallado.
- "Hunsbanddddddd
que me piro. Te dejo la cena preparadica en el horno.. cuando veas que el queso
empieza a gratinar, apaga ¡¡listo para comer!!!.. cuidadin no te me vayas a
abrasar la campanilla... ¡¡¡Hasta luegorrr!!!!"
No he enviudado, así
que la cosa fue bien... es más, mejor que bien. Me dijo que estaba
¡¡buenísimo!!!..
No hay foto... ya me parecía "demasiao" decirle "antes de comer haz una retrataura"... (lo mismo empezaba a indagar qué le había echao ;-))
Hale! una idea más para
darle salida a restos de comida que se van quedando por ahí.
¡¡ BUEN FINDE !!!
(si ya me despido hasta el lunes. En lugar de publicar receta, voy a ver si me pongo al día con vosotros... que últimamente no me da tiempo a leeros a todos y seguro que me estoy perdiendo un montón de cosas ricas).
